escrito propio

LA MUTACIÓN QUE ESTAMOS VIVIENDO

By 18 agosto, 2025agosto 30th, 2025No Comments

LA MUTACIÓN QUE ESTAMOS VIVIENDO

A partir de llevar dolor en nosotros, emociones no reconocidas en nosotros -estrés crónico-, todos hemos creado en algún momento de nuestro desarrollo, una estructura de identidad, la identidad psicológica. Esta identidad es un gran mecanismo de defensa: se crea en nosotros como reacción a los dolores “originales”, aquellos que vivimos cuando somos puro sentir, cuando todavía no hay córtex prefrontal que amortigüe. Como generalmente los adultos significativos de ese niño o niña viven dentro de su propia identidad psicológica, con sus dolores originales activos en sus cuerpos, no pueden acompañar a sus niños a procesar los hechos de dolor que ocurren y que son vibracionalmente afines con sus heridas (la de los padres). Y así el linaje va reproduciendo y modulando los mismos patrones de herida una y otra vez. Hasta nosotros. Nosotros somos los que podemos sacar esos dolores del cuerpo, liberarnos y liberar el árbol.

De verdad siento que está naciendo una nueva raza en nosotros… lo se, lo veo. No tengo idea de cuánto tiempo va a llevar esa transición y tampoco importa. En otro época lo llamaba EL HIJO DEL HOMBRE (Hombre, Dios e Hijo de Dios reunidos) o Lo Nuevo; o también decía que esto que estábamos viviendo todavía, era la pre humanidad, que la HUMANIDAD iba a nacer de nosotros… que iba a nacer en nosotros. Esta mutación que estamos viviendo puede definirse muy sencillito: seres humanos que ya no viven adentro de una defensa. Y no viven más adentro de una defensa (identidad psicológica) porque los dolores emocionales por los que todos pasamos cuando éramos totalmente vulnerables, fueron procesados. Con lo cual la defensa cae, pierde sentido. Y ese ser humano pasa a ser un ser humano totalmente abierto, radiante, que puede vivir en lo que ES y pone en juego todos sus talentos; así, enriquece la vida. Y en un momento de ese proceso, se hace UNO con la VIDA. Pasa de ser humano a HUMANO. La Tierra que no solo es un ser vivo, sino que sobre todo es un ser conciente (un ser de una conciencia que nosotros no podemos siquiera concebir) «desea» ser habitada por HUMANOS. Obviamente la Tierra está en un proceso de intensificación de su conciencia (y desde ahí es que nosotros también lo estamos): desde lo astrológico podemos decir que se trata del pasaje de la conciencia Piscis a la conciencia Acuario. Y la intensificación de la frecuencia de conciencia de la Tierra actua como una poderosísima presión sobre el vehículo humano para que haga su transformación hacia otra forma de conciencia… esta mutación en la que estamos todos metidos y que va a hacer que en unos años no podamos reconocernos (pero al mismo tiempo, in the back of our minds, siempre supimos que íbamos a vivir así). Por todo esto es, que en los últimos años, han surgido técnicas que posibilitan liberar el trauma (simples dolores emocionales de distinta intensidad que todos vivimos cuando estábamos totalmente abiertos), liberar esa carga que llevábamos en las capas geológicas más profundas de nuestro ser y permitir así que nuestros sistemas nerviosos se relajen: esto es lo inédito, esta es la mutación, esto es lo que todo lo cambia: nuestros cuerpos por fin abiertos, nuestro ser integrado, unión con la vida, brillo divino: a esto es a lo que vinimos… no es cierto?

Es así que a nuestra facultad pensante podemos sumarle aquella conciencia en la que habitamos en algún momento y que por dolor y por igualarnos con los adultos que nos rodeaban, clausuramos: la conciencia sentir.

Es interesante, y sobre esto escribía estos días, que nosotros en vida habitamos dos modalidades de conciencia, pero hasta ahora pocos podían vivirlas integrarlas. Porque integrarlas supone descargar esas heridas que nos hicieron fabricar un muro y tomar identidad. Esas conciencias son: la conciencia sentir y la conciencia pensar. En realidad no son dos, no están separadas. Pero en nuestro estado evolutivo (el de hasta hace un minuto) lo están. Y este desbalance hacia la conciencia hiperpensante (es evidente que se sobrepiensa para escapar del cuerpo = donde está cargado el dolor), es la conciencia tecnológica que nombra Eugenio. Ahora, en muchísimos seres se está produciendo esta integración. El proceso es imparable: lo comanda la conciencia de la Tierra.

x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x

Después de escribir esta primer parte voy a dormir a mi hija pequeña y leemos Ferdinand, el toro. Y veo que parte de elegir la conciencia pensante (separada de la sintiente solo puede hacer daño) es porque a los sintientes se les hacía (hace) bullying. Y todos fuimos sintientes.

x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x

Mutación – superhumanos

Las herramientas curativas que aparecieron en estos últimos 20 años (las herramientas curativas que la Tierra propició) son exactamente las que necesitábamos para poder ir al siguiente nivel de conciencia: de la conciencia psicológica – humano a la conciencia cósmica – HUMANO.

Necesitamos sanar las capas geológicas más profundas para poder liberar todo nuestro potencial. La Tierra necesita que nos convirtamos en seres que reconozcamos nuestra unión con ella, y eso ocurre, no a través del intelecto o de la voluntad sino como un hecho energético vivencial (que podemos experimentar en nuestros Cuerpos) en nuestro siguiente nivel de conciencia: la conciencia cósmica. Por eso la conciencia de la Tierra nos regaló estas herramientas curativas ahora.

Vivimos una mutación de la conciencia.

 

CARUTTI

«MODULAR LA EXCITACIÓN SIN REPRESIÓN

PARA QUE PODAMOS SER SERES ACOPLANTES, NO DOMINANTES»

ESTO OCURRE POR DOLOR -DIGO YO, Y SIGO DICIENDO-…

AHORA ESTAMOS INVESTIGANDO EL SISTEMA NERVIOSO

TODOS ESTAMOS SANANDO NIVELES MUY PROFUNDOS

Y TODO EL TIEMPO SE HABLA DE TRAUMA Y DE ESTAR REGULADOS Y DE SOMÁTICA

 

SIGUE EUGENIO:

«ESTAS SON LAS SENDAS DEL FLORECIMIENTO DE OTRA ESPECIE DENTRO DEL HOMO SAPIENS = PODER RESONAR CON TODA LA SENSIBILIDAD» = A ESTO LE LLAMO HUMANO: al ser humano QUE ES CAPAZ DE ABRIRSE A SENTIR

AL SER HUMANO QUE PROCESA SU DOLOR, POR LO TANTO PUEDE DEJAR CAER SU DEFENSA E INTEGRAR LAS DOS FORMAS DE CONCIENCIA = LA QUE HABITAMOS SIENDO NIÑOS Y LA QUE HABITAMOS SIENDO ADULTOS = ESCRITO DE LA REALIZACIÓN DE LA UNIDAD Y DE LOS ESCRITOS AMARILLOS